sábado, 20 de abril de 2013

Métodos básicos para la elaboración de bizcochos



Cuantas veces hemos estado motivados a hacer una tarta de cumpleaños o un pequeño detalle para la reunión de la noche, vamos temprano al super y compramos los mejores ingredientes para esa tarta tan deseada: preparamos la mise en place (terminología francesa que significa literalmente "puesto en el lugar" usada en cocina para tener los ingredientes medidos, picados o utensilios listos antes de cualquier preparación) y nos disponemos a comenzar la faena batiendo los huevos con el azúcar, seguimos con el entusiasmo y uno a uno añadimos todos los ingredientes, molde preparado, vaciamos la mezcla del bizcocho y al horno por unos minutos.




"Mmmm" huele delicioso, esa mezcla dulce que viaja del horno a tu nariz y con alegría esperamos a que el horno timbre para sacar el suculento postre y ¡Oh sorpresa! el bizcocho no sube aunque ya parece horneado o quizás subió más que un algodón de azúcar y al sacarlo del horno baja y se apelmaza.
¿Te has preguntado por qué sucede esto? Vaya desilusión después de tanto empeño para lograr la tarta perfecta.

Aquí os dejamos unos consejitos muy útiles antes de hacer una tarta, explicando las técnicas básicas para su preparación paso a paso y así evitar ese momento bochornoso de angustia :

  • Método de esponjado
El método de esponja define cualquier método donde batimos o montamos los huevos juntos o separados para incorporar aire antes de incorporarlos solos o a cualquier otra mezcla.
El aire que incorporamos en los huevos crea una mezcla esponjada, ligera y ayuda a levar los productos de pastelería.
Cuando elaboramos este tipo de esponja es necesario que los ingredientes y equipo a utilizar reciban un tratamiento antes de empezar a mezclar.
  • La harina y otros ingredientes secos deben ser perfectamente cernidos (tamizados) para asegurar una incorporación correcta de aire.
  • Si se utilizamos mantequilla para la mezcla (generalmente caliente)  la mantequilla debemos  fundirla y dejarla enfriar antes de incorporarla a la mezcla.





  • Método de acremado

Este método combina tanto el método de acremado como el método de esponja y da a los pasteles algunas de las cualidades de ambos métodos. La rica y húmeda corteza del método de acremado y ligereza de su mezcla así como aire extra y esponjamiento producto de las claras de huevo batidas.

Para este método realizamos primero la mezcla de acremado, después se mezclan las claras de huevo y se incorporan a la primera mezcla y por último los ingredientes secos y cernidos (tamizados).
  • Como primer paso mezclamos la mantequilla con una parte del azúcar hasta que esponje, enseguida incorporamos los huevos y yemas de la mezcla y se bate hasta formar una emulsión.
  • En segundo lugar batimos las claras con el resto del azúcar hasta formar picos suaves.
  • La mezcla de las claras se incorpora a la primera mezcla de manera envolvente sin batir mucho procurando perder lo menos de aire incorporado.
  • Por último incorporamos los ingredientes secos y cernidos de manera envolvente sin batir mucho.



Estas técnicas sencillas nos pueden salvar al momento de hacer cualquier bizcocho y con éxito llevar esa tarta de encanto a la fiesta, así que os aconsejo tenerlas como una pegatina en el refrigerador. ¡No olviden pesar todos los ingredientes con exactitud!

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